miércoles, 26 de junio de 2013

Capítulo 4.


La luz se colaba entre las rendijas de las persianas, emití un pequeño gruñido a modo de protesta, jalé del edredón y me tapé la cabeza, siempre había sido muy dormilona. Estaba quedándome dormida de nuevo cuando escuche la melodía de mi móvil, me había llegado un mensaje, saqué mi mano del montón de sábanas y mantas que me cubrían y empecé a buscar a tientas mi teléfono. Cuando lo alcancé estiré mi cuerpo bostecé un par de veces y luego salí de mi escondrijo para leer aquel mensaje.

Hola Sam, no sé si te acordarás de mí pero soy Susan, aquella chica con la que tropezaste en la universidad ¿Recuerdas? Bueno el caso es que me gustaría quedar contigo para dar un paseo y conocernos mejor porque, la verdad me caíste muy bien.

Besos, Susan”.

En estos día tan ajetreados no me había acordado de aquella chica que conocí de una forma un poco embarazosa pero que me había caído tan bien. Decidí contestarle al mensaje.

Hey Susan, la verdad tú también me resultaste muy simpática y bueno, te quiero conocer mejor por eso hoy te espero a las doce de la mañana en el parque Ruffley Lake”.

Dejé mi móvil en la mesilla de noche y me levanté de la cama, al mirarme en el espejo comencé a reírme de forma escandalosa, parecía un mapache, el maquillaje que llevaba la noche anterior ahora mismo estaba corrido sobre mis mejillas y mi pelos bueno, mejor no hablar de ellos. Me paré a pensar en la noche anterior, la verdad era que Louis me había caído muy bien y tenía ganas de volver a hablar con él pero tampoco quería parecer pesada. Pronto comencé a prepararme para salir con Susan.

********

Vi su pequeña figura de espaldas a mí, me acerqué y le puse una mano sobre el hombro, ante el contacto ella se asustó, tanto que emitió un pequeño gritito y botó. Ella se giró y me vio riéndome, intentó poner una mueca enfadada pero no pudo aguantar la risa.

- Vaya susto me has dado Sam- rió
-Perdón, no quería asustarte- le sonreí
-Bueno ¿Qué quieres hacer?- me dijo
-¿Damos un paseo no?- le dije a Susan.
-Vale

Andamos a lo largo del parque, cada una íbamos contando anécdotas y otras cosas para conocernos mejor.
-Entonces ¿Tienes 2 hermanos?- le pregunté
-Sí pero, tú eres hija única ¿no Sam?
-Estás en lo cierto aunque, me hubiera encantado tener hermanos
-Claro y bueno ¿Vives sola?- me preguntó
-Sí ¿Y tú?
-No, sigo viviendo con mi familia- me sonrió

Seguimos hablando y paseando, luego nos sentamos en una pequeña cafetería para descansar un rato. Yo me pedí un frapuccino y Susan un café con leche, mientras nos tomábamos nuestras bebidas seguimos charlando de otros temas.

*Narra Louis*

La voz de mi madre jugando con mis hermanas resonaba en el salón, con una sonrisa empecé a bajar las escaleras, aprovechando la reunión de Hall Cross y que tenía unos pocos días de descanso del tour había venido ha visitar a mi familia a Doncaster, siempre se ha dicho que en casa como en ningún otro sitio y, aquello era la pura realidad.

-Entonces la princesa encontró un precioso anillo que tenía un enorme diamante, lo colocó en su delicado dedo y lo observó con entusiasmo- pronunció mi madre

Mis dos hermanas pequeñas la miraban concentradas, yo permanecía parado en la escalera mirándolas, no quería interrumpir ese momento pero, mis hermanas se percataron de mi presencia y corrieron hacia mí.

-¡Louis, Louis!- gritaban a coro las dos gemelas.

Las dos saltaron a mis brazos, cubriéndolas de besos bajé las escaleras y comencé a jugar con ellas en el salón, las echaba mucho de menos y tenía claro que nunca me acostumbraría a estar separado de mi familia. Mi madre se acercó a mí y me dio un beso en la frente.

-Todos te hemos echado mucho de menos Boo- me dijo
-Yo también mamá- le di un pequeño abrazo

Estuve jugando bastante tiempo con mis hermanas y luego subí a mi cuarto, me senté en la cama y cogí el móvil, revisé twitter y seguí a algunas fans y contesté a varias menciones. Entonces me acordé de algo, de Sam, vi su número de teléfono en mi lista de contactos y se me pasó algo por la mente, quizás iba a parecer pesado pero aquella chica tenía algo especial y quería volverla a ver. Pulsé su nombre y los pitidos empezaron a sonar. Su voz resonó al otro lado del teléfono y no sé por qué pero mi estómago saltó y mi voz se cortó cuando intenté hablar.

-¿Louis?- preguntó

*Narra Sam*

Mi melodía de móvil había sonado en el interior de mi bolso, lo cogí y vi su nombre en la pantalla, algo que hizo que me pusiera nerviosa. Al otro lado del teléfono no se escuchaba nada.

-¿Louis?- pregunté
-Ho-Hola Sam
-¿Qué pasa?
-Bueno te llamaba solo para saber si querías quedar conmigo esta tarde para retomar nuestra conversación- me dijo
-Me parece parece estupendo- le dije
Aunque él no lo viese yo me encontraba con una enorme sonrisa, simplemente él tenía algo que hacía que lo quisiera conocer aunque, él no me gustaba ni nada parecido pero tenía muchas ganas de verle.


- ¿Te recojo a las cinco?- me preguntó
-Sí, te digo mi dirección ¿Vale?
-Vale- contestó
-Hall Gate, número siete- le dije
-A las cinco nos vemos, adiós Sam

Tras su despedida colgué mi teléfono móvil y le dije a Susan quién era y por qué me había llamado. Ella me sonrió y me dijo que su nombre, Louis Tomlinson, le sonaba pero no sabía de qué algo a lo que no le presté mucha atención y seguimos hablando del tema. Finalmente me despedí de ella y puse rumbo hacia mi casa.

*******
Abrí la puerta de mi casa y me dirigí directamente a la cocina, solté las llaves que, resonaron sobre la mesa del comedor, abrí uno de los cajones de la cocina y saqué un delantal que me puse para no mancharme, iba a cocinar cualquier cosa rápida así que fui al frigorífico y cogí un poco de jamón de York y queso para fundir. De la despensa saqué una bolsa con pan de molde y con todo eso preparé un par de sandwich mixtos y luego hice un poco de ensalada. Coloqué la comida en una bandeja y fui a sentarme en la gran mesa situada en el centro del salón, donde solía comer siempre. Después de comer vi un poco la tele y cuando dieron las cuatro decidí subir a mi habitación para arreglarme porque cuando había paseado con Susan llevaba unas Vans, un suéter de color azul marino y encima un chaquetón así que, decidí arreglarme un poco más. Abrí el armario y cogí unas cuantas prendas de ropa, me puse unos jeans ajustados, un jersey de hilo de color beige, encima una chaqueta color camel y en los pies unos zapatos de cordones de color camel a conjunto con la chaqueta. Me hice una trenza de sirena que eché hacia un lado y mi maquillaje se basó en un poco de colorete, rimel y gloss. Cuando terminé de coger mi bolso y demás cosas el timbre sonó, bajé rápidamente y abrí la puerta, frente a mí se encontraba Louis con su natural pelo despeinado pero hoy llevaba puesto un beanie sobre él, un jersey azul marino y unos jeans desgastados.

-Hey Sam- me saludó
- Hola Lou- dije
-Me gusta ese apodo
-La verdad es que me ha salido de forma improvisada- reí
-Y bueno ¿Qué tal estás?- me preguntó

Mientras caminábamos y hablábamos Louis tenía sus ojos azules posados en mí, algo que me intimidaba y a la vez me gustaba además, sentía que él siempre estaba sonriendo algo que me gustaba mucho.

-Bien- le dije

En ese momento Louis se paró y me agarró por los hombros, mientras me miraba directamente a los ojos, lo que hizo que me sonrojara.

-Sam antes de que andemos más, tengo que algo que contarte porque creo que tú no sabes nada sobre esa parte de mi vida así que vamos a sentarnos allí-señaló un banco-y te cuento todo con tranquilidad- me dijo

Aquellas palabras me dejaron un poco confusa para que mentir, luego comenzamos a andar hacia aquel banco y nos sentamos entonces miré a Louis a los ojos y esperé a que él empezase a hablar.

1 comentario:

  1. comoooo molaaaa me encantaa :D y que le querra decir Louis a Sam??? quiero saberlo yaaa :D mi besoss <3

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