Capítulo 34.

*Narra Harry*

“Porque yo te quiero” esas palabras corrían por mi mente oprimiendome el pecho, dónde mi corazón estaba palpitando rápidamente, escuché cómo Chloe soltó un pequeño suspiro, yo no supe cómo actuar, sólo levanté la cabeza y la miré, incapaz de articular palabra, ella me miró con sus ojos turbios y esbozó una pequeña mueca.

-Entonces ¿me quieres?- solté en un débil susurró mientras sostenía sus manos

Ella cerró los ojos con fuerza y agachó la cabeza pesadamente, estuvo así unos segundos, mientras tanto yo acariciaba sus manos, que ahora estaban heladas cómo la nieve, mis ojos la observaban con nerviosismo, rezando para que todo saliese bien.

-Sí- dijo en un suspiro

Mi cuerpo actuó por si solo, la estreché entre mis brazos mientras acariciaba su espalda, escuchaba cómo su respiración se relajó, me separé un poco y cogí su cara entre mis manos, acariciando sus mejillas con mis pulgares.

-Dame una oportunidad Chloe- dije mirandola directamente a los ojos

-Harry...- bajó la mirada

-Chloe, mírame- sus pupilas se encontraron con las mías- yo nunca te haría daño, nunca, no sé cómo ha pasado esto...pero sé que te quiero, dejame intentarlo- susurré

Cerró los ojos y se mordió su labio inferior débilmente, estaba tomando una decisión, ahora mismo mi corazón estaba pendiendo de un hilo, un débil hilo que en cualquier momento se podía romper, mientras, yo estaba deseando con todo mi ser que ella me diese un sí.

-Podemos intentarlo- ella dijo con sus ojos brillando

-¿Eso es un sí?-pregunté con una pequeña sonrisa cubriendo mi rostro

-Sí Harry, eso es un sí- sonrió

La atraje hacia mí, fundí mis labios con los suyos, mis manos temblorosas se entrelazaron con las suyas, sentía su respiración cálida haciendo cosquillas en mis labios, la besé con dulzura, expresando todos mis sentimientos, nunca había sentido tanto con un beso. Cuando nos separamos juntamos nuestras frentes y nos miramos a los ojos.

-Esto es una locura- ella rió

-No, has sido tú la que me has vuelto loco- susurré

*Narra Louis*

Estoy muy cansada- dijo Sam tirada en el sofá boca abajo

Yo dejé las llaves en la mesilla de la entrada principal y cerré la puerta, acabábamos de llegar a nuestra casa, me acercqué al sofá y me tumbé a su lado, me quedé observando su perfil, era preciosa, aún seguía sin creerme que ella me quería, que estábamos juntos, con Sam todo era perfecto, la quería tanto que no me imaginaba una vida sin ella, aparté un par de mechones de pelo de su cara y se los coloqué detrás de la oreja, luego le di un beso en la mejilla, ella se giró y me miró sonriente.

-¿Qué pasa?- ella rió

-Nada- sonreí- sólo te he visto aquí tumbada y me han dado ganas de echarme a tu lado- la abracé de modo que ella quedaba de cara a mí

-Estás muy guapa- le dije

-Te quiero mucho ¿sabes?- ella me acarició la mejilla produciendome un sensación escalofriante

-Yo también, tonta- reí

La casa se encontraba en completo silencio, sólo se escuchaban los pajarillos trinando en el jardín, me pasé las manos por el pelo y suspiré, un suspiro de felicidad, ahora tenía todo cuanto quería, sentí cómo Sam se tensó a mi lado, me miró mientras estaba abrazada a mi torso, esa mirada curiosa.

-¿Seguro que no te pasa nada, Louis?- se incorporó un poco apoyándo su codo en el brazo del sofá

-No me pasa nada, de verdad- reí- estaba pensando en los útimos meses que hemos pasado juntos y Sam- la miré- no quiero que esto se acabe nunca, contigo soy la persona más feliz del mundo- me acerqué para besarla

-Eres muy cursi- rió frente a mis labios

Comencé a reírme mucho, esta chica siempre me sorprendía con sus respuestas, nuestras carcajadas resonaban en el salón, me giré y me coloqué encima suya, con mis rodillas a los lados de su cintura y mis brazos apoyados en el sofá sobre su cabeza, ella me miraba mientras contenía la risa.

-Así que soy cursi ¿no?- la miré con una media sonrisa

-Sí- respondió y yo empecé a hacerle cosquillas

-¡Louis, para! ¡Louis, por favor!- se estaba ríendo a carcajadas

Después de unos minutos paré y la miré mientras reía, ella me hizo señas para que me acercase, eso hice.

-Eres un cursi, pero...si te soy sincera yo tampoco quiero que esto se acabe nunca- susurró en mi oído, erizandome la piel

Me separé, nuestras caras estaban a milímetros, ella estaba analizando las facciones de mi cara con sus enormes ojos azules, luego, pasó sus manos por mi nuca atrayéndome hacia ella, nuestros labios se encontraron bruscamente, pasó su lengua por mi labio inferior orginando una sensación ardiente en mi interior, mis manos estaban alojadas en su espalda acariciando la piel desnuda debajo de su camiseta sientiendo cómo ella se estremecía.

-Te quiero- susuró mientras sus labios se volvían a fundir con los míos

*Narra Chloe*

Me quité de la cara unos mechones sueltos que sobresalían de mi coleta, sentí cómo la mirada de Harry se clavó en mí, yo le miré y le dediqué una pequeña sonrisa. Estábamos paseando por una pequeña calle que no estaba muy concurrida y la verdad que a solas con él me sentía realmente bien, cómo si estuviese protegida, era un sentimiento extraño. Hacía unas horas que había tomado una decisión, le daría una oportunidad a todo esto, la idea era un poco descabellada, pero si los dos sentíamos algo ¿por qué no probarlo? Hablé con él y le dije que a pesar de que nuestro sentimiento era mutuo, teníamos que ir poco a poco, esto me había llegado de imprevisto y yo aún seguía sin asimilarlo, todo había sucedido muy rápido y los dos aún teníamos que conocer muchas cosas el uno del otro.

-¿Tienes frío?- preguntó Harry

-No ¿por qué?- sonreí

-Estás tiritando- me dijo

Era verdad, me había sumergido tanto en mis pensamientos que ni si quiera me había dado cuenta de que estaba tiritando, me subí un poco más la cremallera de mi sudadera en busca de algo de calor.

-Toma- se quitó su cazadora para darmela

-No hace falta Harry- le dije

Él no me hizo caso y me colocó su chaqueta por encima de los hombros, él se quedó sólo con una fina camisa, pero no parecía tener frío. Lo que acababa de hacer parecía una escena de película romántica, la típica chica que tiene frío y su novio le da su cazadora, espera ¿había pensado en Harry cómo mi novio? Me sonrojé con sólo pensarlo, la verdad era que sí, era mi novio, estábamos empezando, pero presentía que esto era el principio de algo grande.

-¿Quieres entrar?- señaló una pequeña cafetería de aspecto modesto

-Sí- sonreí

Pasé delante suya y él puso su mano en la parte baja de mi espalda, guíandome hacía el interior del pequeño local, su tacto me había producido un escalfrío, por mucho que no quisiera aceptarlo, sentía algo por Harry, algo muy díficil de descifrar, pero que poco a poco estaba descubriendo. Nos sentamos en una de las mesas del fondo, el bar no estaba muy lleno, sólo había unas cuantas parejas. La camarera se acercó a nosotros dos, era un mujer bajita y rellenita de aspecto afable.

-¿Qué vais a tomar, hijos?- sonrió

-Yo quiero un café manchado- dijo Harry

-Yo un batido de vainilla, gracias- sonreí

-De acuerdo, ahora mismo os lo traigo- nos miró sonriente y se marchó

La mujer despareció entre las mesas, yo miré a Harry para inmediatamente bajar la mirada al encontrarme con sus ojos verdes mirandome, me intimidaban.

-¿Batido?- rió

-Sí, no me gusta el café- le dije

-Lo apunto en mi lista mental de cosas sobre tí- me guiñó un ojo

La señora bajita volvió a aparecer y nos dejó nuestras bebidas y un trozo de pastel de chocolate coronado con una guinda.

-De parte de la casa- dijo al dejar el plato con el pastel

Le dediqué una sonrisa y luego ella se marchó, le di un sorbo a mi batido, Harry comenzó a hablar,

-Así que ¿eres fan de nuestro grupo?

-Correcto- dije un poco avergonzada

-¿Tú canción preferida?- me preguntó

-Same Mistakes, sin duda- sonreí

Cogí un trozo de pastel con la cuchara y lo probé, estaba muy rico para ser sinceros, Harry me miró con una pequeña sonrisa.

-¿Qué pasa?- reí

-Te has manchado de chocolate- sonrió y automáticamente busqué una servilleta para limpiarme

-No- dijo Harry- dejame a mí- pronunció

Mi corazón empezó a palpitar rápidamente, Harry se acercó, tenía mis ojos clavados en los suyos e incluso diría que me costaba respirar, pasó su dedo pulgar por mi mejilla para limpiar el chocolate dejando a su paso una sensación abrasante, dejó su mano en mi mejilla, nuestras caras estaban a unos milímetros, sus ojos color esmeralda se clavaron en mis pupilas, durante unos segundos eternos estuvimos en silencio, sentí cómo mis mejillas ardían, luego él bajó la mirada y se separó.

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Pagamos la cuenta y salimos del local, una masa de aire frío me dio en la cara, fuera hacía un frío tremendo, era noche cerrada, la luna no aparecía por nigún lado. De repente una cosa pasó por mi mente.

-¿Les vas a contar esto a los chicos? A lo nuestro, me refiero- dije

-Si quieres, podemos esperar un poco- respondió

-Gracias por comprenderme Harry, de verdad- le miré y él me sonrió

Los dos seguimos andando, Harry me miró levemente, sus ojos brillaban, se veía que estaba feliz. Yo también le quería...pero no sabía si hasta el punto de estar enamorada de él, demasiadas preguntas rondaban por mi cabeza. Él se acercó un poco más a mí.

-¿Puedo?- miró nuestras manos y yo asentí

Entrelazamos nuestras manos y un sensación hormigueante me recorrió de la cabeza a los pies, se sentía tan bien el tacto de nuestros dedos entrelazados, con una sola mirada, Harry me hacía sentir cómo si sólo estuviesemos nosotros dos y nadie más nos rodease, aquello era mágico. Él miró su reloj.

-Te acompaño a casa- dijo

-Está un par de calles más allá- sonreí

Seguimos caminando cogidos de la mano bajo el cielo oscuro, me sentía tan bien a su lado que no quería separarme, él estaba causando sentimientos muy fuertes en mi interior. Unos diez minutos después habíamos llegado a la avenida dónde yo vivía, él me acompaño hasta la puerta.

-Espero que hoy te lo hayas pasado bien- él se pasó las manos por el pelo, nervioso

-Harry, mírame- él subió la cabeza

-No estés nervioso, ni tengas miedo de lo que yo te pueda decir, escuchame, ya he tomado una decisión y es que vamos a intentarlo ¿vale? Todo va a salir bien- le dije mientras le miraba a los ojos

Él se acercó y me dio un beso en la mejilla, yo sabía que él hubiera querido besarme en los labios pero que estaba haciendo un esfuerzo por respetar mi decisión. “¿Pero qué mierdas estás haciendo Chloe? Bésale, lo estás deseando” exclamó mi mente y yo me dejé llevar, cuando Harry se separó de mi mejilla le agarré por las solapas de su cazadora y le atraje hacia mí, le pillé por sorpresa, sus labios carnosos eran muy suaves y cálidos , él reaccionó y comezó a besarme, lentamente, expremiendo cada segundo, un centenar de mariposas estaban revoloteando en mi estómago ahora mismo, luego me separé. Harry me miró con una media sonrisa, sorprendido, yo me limité a sonreírle.

-Buenas noches, Harry- pronuncié cantarina

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Lo siento, de verdad, lo siento mucho, estos días no he encontrado un hueco para escribir he estado super liada con los exámenes, perdón. Bueno, espero que os guste el capi y eso, cómo siempre 3 comentarios y subo, luv ya bbys.

Capítulo 33.

*Narra Chloe*

“Sé que esto te va aparecer una locura, pero necesito decirlo, desde que te vi el otro día no dejo de pensar en tí, sólo, no sé, necesito verte Chloe, me estoy volviendo loco y lo peor es que no sé el motivo, tú eres la única que me puede ayudar a encontrar la solución. Te espero hoy a la una en Picadilly Circus, Harry xx” leí el mensaje en mi mente, mi mano empezó a temblar ligeramente, solté el móvil en el escritorio y comencé a dar vueltas por la habitación ¿Qué hacía ahora? Mi corazón estaba gritando un sí, mientras que mi mente sentenciaba un no rotundo. Él se había sincerado conmigo, pero yo no sabía que hacer ¿Cómo debía tomarme aquello? Miré el reloj en mi muñeca, las once y media, no tenía mucho tiempo, aún estaba en pijama y para llegar a Picadilly Circus tenía que coger el metro. No le di más vueltas a la situación, esto debía aclararse y cuánto antes mejor.

*Narra Sam*

-Entonces..¿tú también estás en un grupo?- le pregunté

-Sí, por el momento estamos trabajando con los preparativos de nuestro primer single- sonrió

La calle estaba abarrotada de gente, algo normal puesto desde que estaba en Londres este había sido uno de los pocos días soleados que había habido. Perrie y yo estábamos paseando juntas mientras hablábamos, habíamos hecho muy buenas migas a decir verdad, los chicos se habían quedado parados unos metros atrás mirando un escaparate, me giré y les vi a los cuatro ríendo mientras señalaban el escaparate de la tienda.

-¡Chicos! Vamos a llegar tarde a comer si os paráis cada dos por tres- reí

Giraron la cara y me miraron con una sonrisa, Louis dio una pequeña carrera y se situó a mi lado, entrelazó sus dedos con los míos produciendome un escalofrío al sentir la calidez de su mano junto a la mía, le sonreí.

-Hoy estas muy guapo- susurré con una débil risita

-Tú también- me dio un corto beso

Observé cómo Zayn abrazó por la cintura a Perrie, los dos rieron, hacían buena pareja y parecían muy felices sinceramente.

-Son muy lindos- reí

-Zayn nos habló de ella hace unos meses y bueno, ahora ya les ves- me dijo Louis

-Me ha comentado que también está en un grupo- dije mientras andábamos

-Sí, Little Mix, también se formaron en X Factor- me informó

Liam y Niall estaban un poco más atrás, les llamé con un silbido, me miraron ríendo.

-Liam, te ha gustado la camiseta ¿a que sí?- reí

-Mucho Sam- me sonrió

-¿Y para mí no hay regalos? Que injusticia- Niall agachó la cabeza y la sacudió de un lado a otro

-Bueno- dije alargando la 'e'- ya te compraré algo- él sonrió se acercó y me dio un abrazo

-Era broma, tonta- sonrió

-De todos modos, ya te haré algún regalito- le sonreí

Seguimos paseando por la calle entre bromas, a este paso llegaríamos al restaurante cuando fuera la hora de merendar.

*Narra Harry*

Las llaves, el móvil, la cartera...volví a comprobar que llevaba todo encima antes de salir de casa, no sabía si ella iría y no aguantaba más esta angustia ¿Qué le diría cuándo la tuviese frente a mí? Seguramente mi mente se quedaría en blanco y las palabras que había ensallado hace unos minutos se volarían cómo las hojas de otoño en una tarde de viento. Me miré en el espejo de la entrada una vez más, las ojeras habían desaparecido, bueno, al menos ya no se notaban tanto, revolví mis rizo con la mano y me puse bien la cazadora, ahora sí, ya estaba listo para salir. Cerré la puerta principal con un pequeño portazo, saqué las llaves de mi coche y las pulse desbloqueando el cierre del coche, abrí la puerta y me acomodé en el sillón del conductor. Arranqué, la radio comenzó a sonar mientras yo apretaba el acelerador, empecé a tamborilear con mis dedos pulgares el ritmo de una canción muy pegadiza, cuyo nombre no sabía, mientras apretaba el volante entre mis manos. Chloe volvió a aparecer por mi mente, sus ojos azules con ese color cielo que te hacían perderte en ellos, una sonrisa cubrió mis labios, volví mi vista a la carretera y frené en seco.

-¡A ver por dónde miras, imbécil!- gritó un hombre mientras cruzaba el paso de cebra

Solté un suspiró y afloje el agarre del volante, casi atropeyaba a ese hombre, me había distraído pensando en ella. En un sólo día me estaba dando más dolores de cabeza de los que podía imaginar. En unos quince minutos había llegado a Picadilly Circus, aparqué y eché el seguro del coche, a paso ligero me sitúe en la parte más visible de la avenida, tropecé, tenía desatados los cordones de mis converse, me agaché y comencé a atarmelos, una zapatila, la otra...vi cómo dos pies se pararon frente a mí, alcé la cabeza para ver quien era. Mi corazón se desbocó, ella estaba parada frente a mí mientras contenía una pequeña sonrisa, me puse de pie con un pequeño brinco y me pasé las manos por el pelo, nervioso, la miré.

-Hola Chloe- me mordí el interior de mi mejilla, disimulando el nerviosismo

-Hola- ella metió las manos en los bolsillos de su sudadera

Llevaba puesta una sudadera con una carita sonriente, unos jeans ajustados, unas vans y el pelo recogido en una cola alta y no tenía ni una gota de maquillaje puesto, estaba preciosa. Estaba mirandola, analizando cada detalle, ella me pilló observandola, pero no aparté la vista de sus ojos azules, parecía nerviosa.

-Pensaba que no ibas a venir- miré hacia el suelo

-Bueno, aquí estoy ¿qué se supone que tenías que decirme?- su voz tembló

-Chloe..- dije pesadamente y la agarré de la mano para tranquilizarla, ella la apartó bruscamente

-¡No me hables así ni siquiera me conoces!- gritó mientras me miraba a los ojos

Me dio un pinchazo en el corazón, era la verdad, pero precisamente estaba aquí para solucionar eso, quería..no sabía lo que quería, sólo, no sé, estar con ella, sentirme bien, porque por algún extraño motivo con ella me sentía bien.

-Chloe, por favor, para, no estoy haciendo nada malo, no sé por qué te comportas así- la agarré por los hombros, ella miró hacia otro lado, me aparté

Estaba caminado cabizbaja con las manos metidas en los bolsillos, podía distinguir su ceño fruncido, suspiré, iba a ser difícil poder habllar con ella, pero las palabras salieron solas de mi boca.

-No sé cómo es posible esto, pero sé que cuando estoy a tu lado me siento mejor, no sé si esto es lo que llaman amor o simplemente me estoy volviendo loco, hace un día que te conozco y parece casi imposible que me pueda sentir así contigo, pero es la verdad, anoché no dormí nada, sólo pensaba en tí, una y otra vez, buscando el motivo por el que me hace sentir así, pero no encontré niguno, bueno, aparte de que eres preciosa- sonreí débilmente mientras miraba al suelo- pero no es sólo eso, cuando te vi sentada allí en el backstage sentí cómo si te conociese de siempre, cómo si estuviésemos destinados a encontrarnos y desde entonces cada vez que me mirabas sentía cómo mi corazón palpitaba rápidamente, sólo quiero una respuesta Chloe, sólo eso ¿por qué me siento así?- la miré de reojo

-¿Qué quieres que te diga ahora Harry?- me miró a los ojos, los suyos estaban empañandose, una pequeña lágrima se deslizó por su mejilla

Me acerqué no soportaba verla llorar, no, la abracé y la sostuve contra mi pecho mientras le acariciaba la mejilla, estaba tan confundido, ahora, no sabía que hacer.

-No llores por favor- susurré- vamos a sentarnos en ese banco, ven- la agarré de la mano

*Narra Louis*

-¿Una mesa para seis personas?- preguntó el camarero

-Sí, por favor que estén en una zona reservada, que no hay mucha gente- dije

-Claro Sr. Tomlinson, síganme- nos miró a los seis

Sam estaba a mi lado mirando todo, este restaurante era uno de los mejores de Londres, era muy bonito y además servían una comida deliciosa, los chicos y yo solíamos venir mucho. Seguimos al camarero por unos pasillos hasta que llegamos a un amplio comedor decorado con mesas de nogal con unos manteles rojo clavel, sólo había un par de parejas comiendo.

-Tomen asiento, por favor- el camarero nos señaló una mesa

-Gracias Bernard- pronunció Liam mientras se sentaba

-Veo que se acuerda de mi nombre- el camarero rió

-Con todas las veces que venimos es normal que recuerde tu nombre- sonrió

-Bueno, aquí les dejo los menús, vuelvo dentro de unos minutos- se marchó

Me senté, Sam seguí de pie mirando el comedor, realmente era muy bonito, estaba bien ilumidado y toda la mantelería estaba a conjunto con las cortinas dando un aire, no sé, llamemoslo sofisticado.

-Todo esto es precioso- dijo Sam mientras se sentaba

-Si el sitio es bonito ya no te digo si la comida de aquí está rica- dijo Zayn mirandola sobre el menú que sostenía en sus manos

El sonido del rugido de unas tripas resonó en el comedor, comenzamos a reírnos mucho.

-Ups he sido yo- Niall rió

Unos veinte minutos después cada uno teníamos nuestros platos en la mesa, todo tenía muy buena pinta, comenzamos a comer, poco después Sam habló.

-¡Oh dios mío! Creo que tengo nuevo restaurante preferido- rió

-Te dije que todo estaba riquísmo- la miré

*Narra Sam*

Todos habíamos terminado de comer ya, Louis y yo estabamos andando por unos pasillos, los demás estaban aún en el comedor y nosotros dos mientras tanto estábamos buscando una terraza que según Zayn daba unas muy buenas vistas de Londres.

-¿Seguro que es por aquí?- reí

-¿Dudas de mí?- él se paró y me miró

-No, bueno un poco, tú sentido de orientación no es muy bueno que digamos- le miré ríendo

Él se acercó y me cogió en brazos echandome sobre su hombre, mientras tanto yo le daba pequeños puñetazos en la espalda.

-¡Bajame Louis, bajame ahora mismo!- grité

-Di 'Louis es el mejor y le quiero mucho'- rió

-No voy a decir eso- me reí

-Pues te quedas aquí- volvió a andar

-¡Vale, vale! Louis es el mejor y le quiero mucho- repetí ríendo

Me bajo al suelo y me agarró por las muñecas, mientras me miraba ríendo, le quería tanto, sin él no sería nada, Louis siempre estaba ahí para apoyarme, hacerme sentir bien y yo no podía estar más enamorada.

-¿Qué piensas?- me dijo mientras se acercaba

-En lo mucho que te quiero, tonto- reí

-¿Me das un beso?- preguntó mientras entrelazaba sus manos en mi cintura

-Uno y los que quieras- rocé nuestros labios

Fundió sus labios con los míos, suaves y cálidos, posé mis manos en su espalda atrayendole hacia mí, su lengua se abrió paso jugando con la mía, el tacto de nuestros labios me producía una sensación escalofriante, los vellos de mi nuca estaban erizados, sus labios apasionados besandome con deseo, un calor abrasante recorrió mi cuerpo. Cuando no aguantamos más, los dos nos separamos jadeando y mirandonos a los ojos,

-Te quiero- susurré

*Narra Harry*

Nos sentamos en el banco, la miré, ella se limpió las pequeñas lágrimas con las mangas de su sudadera y me miró, le acaricié la mejilla con tristeza, me dolía verla así, abrí mis brazos y la abracé, ella apoyó su cabeza en mi hombro.

-No sé que decir- murumuró

-Sólo di lo que sientes- le acaricie el pelo

-Desde que descubrí a One Direction siempre sentí algo más especial por tí, una debilidad por decirlo así, era una tonteria, pero aunque no te conociese cuando veía los vídeos y te veía sonriendo, me sientía mejor, eras un apoyo para mí y ahora que te conozco mi corazón esta hecho un lío, una parte me dice que me vuelves loca con esos enormes ojos verdes, pero otra me grita 'cuidado Chloe, te vas a hacer daño' y esto es una locura Harry- ella se calló y sollozó de nuevo

-Yo nunca te haría daño- le cogí la cara entre mis manos y le limpié las lágrimas con mis pulgares

Me miró con esos enormes ojos azules, era preciosa, mi cuerpo actuó sólo no me dio tiempo a pensar. Posé mis labios sobre los suyos y la besé, una sensación que nunca había conocido explotó en mí, mi corazón desbocado, mi estómago brincando y mis manos temblando débilmente, mierda, estaba enamorado. Sus labios se sentían tan bien con los míos, suaves, cálidos, nunca un beso había significado tanto para mí, me separé y la miré, luego le acaricié las mejillas.

-Esto no está bien- ella susurró mientras se acariciaba los labios

-¿Por qué?- dije desconcertado

-¡Nosotros no podemos estar juntos Harry!- ella gritó- y con esto sólo me haces más daño, porque yo.. te quiero- sus palabras salieron en un suspiro

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 Holiiiiii, espero que os guste el capítulo, de verdad chicas, intento subir capítulo cada vez que puedo, tener paciencia y eso, cuando haya tres comentarios subo, besis.